Rock & death

Hay veces que los camiones no pasan por que NO PINCHE PASAN (La verdad nomás me he subido alos SUBA una vez y no sé como estén todos los días así que esto fue antes del suba) y ese día fue uno de esos en los que no pasaba. En mi enojo decidí que mejor caminaba, total, ya había hecho esa distancia cientos de veces y era caminar aproximadamente media hora a la que ya estaba acostumbrado por que suelo caminar demasiado. Me fui caminando por donde no debía, una colonia de malandrines que por suerte salí ileso pero al cruzar esa colonia pasaba por una parada de camión donde un tipo venía del otro lado de la banqueta caminando al lado contrario del que yo iba.

Alcancé a verlo con mi vista superdesarrollada acertando que era un rockero, metalero para ser exacto. Un pelón de estatura media casi baja, vestido de negro con su respectiva camiseta de la casa del rockero rock & death, sus pantalones negros y creo que unas botas militares clásicas de metaleros. Al pincipio pensé que solo era un rockero más ya que la verdad no he tenido ningún conflicto con algún rockero que trate de asaltarme o pegarme nomás por que sí y por eso no le di mucha importancia pero al ver que apresuraba su paso pensé en que tal vez trataría de hacer un movimiento extraño.. Ese rockero en el que confiaba sería el rockero que me sacaría el susto más grande de toda mi puta vida.

Cuando quedamos paralelos apresuré el paso y después de que un carro pasó entre nosotros, el pelón robusto pegó una corrida marca diablo al lado donde yo estaba. Yo alcancé a verlo de reojo y todo lo que pensé fue: "Corre por tu piiinche vida! no te alcanza el gordito este ni verga!!" Así que corrí como si no hubiera mañana, como si fuera a llegar tarde a una cita, como si me anduviera cagando, como si un gatillero me hubiera dicho "Cabrón córrele y te doy medio minuto para que te pierdas de mi vista o te acribillaré". Cuando me dí cuenta, el tipo solamente cruzó la calle apresurado tal vez por que un carro venía muy pegado al otro.. Me sentí en un grado alto de estupidez ya que venía mucha gente y carros, opté por hacerme el ser más pendejo del mundo y seguí corriendo hasta que mis pulmones destruídos por el humo me lo permitieron pero eso sí, lejos de la multitud que me observó correr despavorido por NADA.

Son de esas cosas que no puedes evitar hacer, instinto animal.